Qué son los filtros HEPA y cómo se usan en climatización de hospitales

¿Sabes qué son los filtros HEPA? En tiempos de coronavirus, es más importante que nunca mantener unas condiciones idóneas de limpieza y purificación del aire en entornos de alto riesgo. Para los sistemas de climatización de hospitales, los filtros HEPA son una elección habitual (y acertada). Te explicamos por qué.

Qué son los filtros HEPA

HEPA son las siglas de la clasificación High Efficiency Particulate Arrest, que en inglés significa «alta eficiencia de arresto de partículas».

Se trata de una categorización que se otorga a todos aquellos filtros que cumplan o superen una serie de requisitos con respecto a la eficiencia en cuanto a la retención de partículas suspendidas en el aire.

Sin embargo, de forma metonímica, denominamos filtros HEPA a todos aquellos filtros que se encuentran dentro de esta categorización.

¿Cuáles son los requisitos para que un filtro sea HEPA? 

Para que un filtro ( o, más bien, el certificado del mismo), sea considerado HEPA, las fibras que lo componen no deben superar un diámetro de entre 0,2 y 0,5 micrones.

En un filtro HEPA, las fibras están dispuestas de manera aleatoria. Esta disposición ha probado ser la más efectiva en el secuestro de las partículas más pequeñas que se encuentran en suspensión en el aire.

Dichas fibras están habitualmente compuestas de fibra de vidrio. La fibra de vidrio es un material que consta de numerosos filamentos cerámicos basados en dióxido de silicio (SiO2) extremadamente finos.

¿Por qué se usan estos los filtros en los sistemas de climatización de hospitales?

Al ser lugares llenos de enfermos, los hospitales (y los centros sanitarios, en general), son obviamente un entorno de riesgo para la transmisión de enfermedades.

Por eso hay protocolos tan estrictos en lo que se refiere a la higiene y la seguridad. Todas estas precauciones tienen el mismo objetivo: evitar que se produzca contaminación. Esta se puede producir por contacto directo o por el aire.

El riesgo de transmisión por contacto directo se intenta minimizar con todas las medidas preventivas de higiene, profilaxis y distancia que se aplican tanto al personal médico como a los pacientes. El riesgo de transmisión por aire, sin embargo, es más difícil de controlar.

El uso de mascarillas y equipos de protección individual es importante, pero también es fundamental que, en los procesos de filtración y climatización de aire en hospitales, este salga de los circuitos tan descontaminado de partículas como sea posible.

Filtros para espacios cerrados

Los filtros HEPA no solo se usan en hospitales. También están presentes en los circuitos de climatización y renovación de aire de otro tipo de espacios cerrados con requerimientos especiales.

Los aviones son un ejemplo: al estar la cabina presurizada, no se puede coger aire del exterior para renovar el del interior, que debe reciclarse.

Se trata de un ambiente con una alta concentración de personas consumiendo oxígeno, emitiendo CO2 y lanzando al aire cualquier sustancia presente en el aparato respiratorio susceptible de quedar suspendida en el aire.

También encontramos estos filtros en dispositivos más inesperados, como por ejemplo aspiradoras o prototipos de mascarillas.

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